Last updated on mayo 14, 2024
Dormir del lado izquierdo durante el embarazo es una recomendación comúnmente sugerida por los profesionales médicos por varias razones que tienen en cuenta tanto el bienestar de la madre como el del bebé en desarrollo. Aquí hay algunas razones por las que se considera beneficioso:
- Mejor circulación: Al acostarse del lado izquierdo, se reduce la presión sobre la vena cava inferior, que es la vena principal que transporta sangre desde la mitad inferior del cuerpo hasta el corazón. Esto permite una circulación sanguínea óptima, lo que ayuda a prevenir la presión sobre los órganos internos y a asegurar un suministro adecuado de sangre y nutrientes al feto.
- Flujo sanguíneo uterino: Al dormir sobre el lado izquierdo, se maximiza el flujo sanguíneo hacia el útero, lo que proporciona un entorno más favorable para el crecimiento y desarrollo del feto. Esto es especialmente importante durante el tercer trimestre del embarazo, cuando el bebé está creciendo rápidamente y necesita un suministro constante de oxígeno y nutrientes.
- Reducción de la presión sobre los órganos: Dormir del lado izquierdo puede ayudar a aliviar la presión sobre el hígado y los riñones, lo que puede ser beneficioso para las mujeres embarazadas que experimentan hinchazón o presión en estas áreas debido al crecimiento del útero.
- Alivio del reflujo ácido: Algunas mujeres embarazadas experimentan reflujo ácido, especialmente durante el tercer trimestre. Dormir del lado izquierdo puede ayudar a reducir esta molestia al mantener el estómago por debajo del esófago, lo que ayuda a prevenir que los ácidos gástricos se filtren hacia arriba.
- Facilita la respiración: En la posición del lado izquierdo, el útero no ejerce presión sobre el diafragma, lo que facilita la respiración para la madre y proporciona un mayor espacio para que los pulmones se expandan completamente.
Si bien dormir del lado izquierdo se considera generalmente seguro y beneficioso durante el embarazo, es importante que las mujeres embarazadas encuentren la posición que les resulte más cómoda. Si experimentan molestias o dificultades para dormir en esta posición, pueden hablar con su médico para explorar otras opciones que les proporcionen un descanso adecuado durante la noche.