Limpieza Efectiva con Bicarbonato de Sodio
El bicarbonato de sodio es conocido por su capacidad para limpiar y desodorizar, haciéndolo ideal para el mantenimiento regular de tu lavavajillas. Vamos a explorar cómo puedes utilizarlo para mantener tu máquina en perfecto estado.
Primero, limpia cualquier residuo visible en el interior del lavavajillas. Asegúrate de que todas las piezas desmontables, como los filtros y aspersores, están fuera para facilitar la limpieza.
Espolvorea bicarbonato de sodio en el fondo del lavavajillas. Usa aproximadamente media taza y distribúyelo de manera uniforme. Esto ayudará a absorber cualquier olor desagradable y a limpiar las manchas persistentes.
Añade vinagre al ciclo de lavado. Coloca una taza de vinagre en la parte superior del lavavajillas y ejecuta un ciclo completo a la máxima temperatura. La combinación de bicarbonato de sodio y vinagre creará una reacción que ayudará a limpiar profundamente y desinfectar.
Después del ciclo, utiliza un cepillo para fregar cualquier acumulación restante. Presta especial atención a las áreas que son difíciles de alcanzar, como las esquinas y bajo las puertas.
Finaliza la limpieza secando el interior con un paño limpio. Esto no solo eliminará cualquier resto de humedad, sino que también ayudará a dejar el interior del lavavajillas impecable y listo para su próximo uso.