Last updated on mayo 14, 2024
Un rumiante es un tipo de mamífero herbívoro que pertenece al orden de los Artiodáctilos y que se caracteriza por su sistema digestivo especializado.
Los rumiantes tienen un estómago compuesto por cuatro compartimentos: el rumen, el retículo, el omaso y el abomaso.
Este complejo sistema digestivo les permite digerir eficientemente materiales vegetales de difícil digestión, como la celulosa.
El proceso de digestión en los rumiantes comienza con la ingestión de alimentos, que luego pasan al rumen y al retículo, donde se produce la fermentación microbiana.
Durante esta fermentación, los microorganismos descomponen la celulosa en compuestos más simples, como ácidos grasos volátiles y gases.
Posteriormente, el alimento regurgitado (bolo alimenticio) es masticado nuevamente (rumia) para facilitar la digestión adicional.
Después de la rumia, el bolo alimenticio pasa al omaso, donde se produce una mayor absorción de agua y nutrientes, y luego al abomaso, que funciona de manera similar al estómago de otros mamíferos, donde se lleva a cabo la digestión enzimática final.
Los rumiantes incluyen una amplia variedad de especies, como las vacas, ovejas, cabras, ciervos, alpacas y camellos, entre otros.
Estos animales desempeñan un papel importante en los ecosistemas naturales y en la agricultura, ya que proporcionan una valiosa fuente de alimentos, como carne, leche y lana, y también ayudan en la fertilización del suelo a través de sus excrementos.